Señor Dios
bendice con tu poder nuestra Corona de Adviento para que, al encenderla,
despierte en nosotros el deseo de esperar la venida de Cristo
practicando las buenas obras, y para que así,
cuando Él llegue, seamos admitidos al Reino de los Cielos.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Amén.
En las fechas previas a la Navidad vivimos un periodo muy especial para los cristianos, el Adviento. “Adviento» viene del latín «adventus», que significa venida y nos prepara para la llegada de nuestro Señor y se representa con el encendido de una corona de velas.
El domingo 28 de noviembre prenderemos la primera vela de nuestras coronas y seguiremos la tradición del encendido durante cuatro domingos seguidos hasta llegar a la natividad del Señor.
La corona de Adviento tiene forma redondeada y está formada por un adorno floral y cuatro velas dispuestas en el centro. El color de las velas es muy importante ya que tienen su propio significado. La auténtica corona llevará tres velas moradas que representan el espíritu de vigilia, penitencia y sacrificio y una rosada que nos acerca al gozo que sentimos ante el nacimiento del Señor. Esta última la prenderemos el cuarto domingo de Adviento. En ocasiones se coloca una vela blanca que simboliza al señor.
Es un momento muy especial para vivir en familia ya que podemos preparar nuestra propia corona y colocarla en un lugar especial de la casa.
Así recordaremos juntos que está próxima la Navidad.